19 oct 2007

Pude haberte amado


Grandes, chicos, blancos, rojos, negros, amarillos, judíos, musulmanes, católicos, budistas,...a todos nos afecta, de un modo u otro, la primavera... y en Octubre, esto nació en la cabeza de un poeta...de mi padre, Carlos Castro Sauritain, a quien agradezco profundamente su sensibilidad por expresarse en el lenguaje más cercano a la hipnosis.


"¿Recuerdas que un día, a fines de Octubre,
Mirábamos juntos navegar un barco?
Siguiendo su estela volaban gaviotas,
Detrás de sus alas volamos también.

Caía la tarde sobre el horizonte,
Tiñendo de rojo las velas, las alas,
Los sueños despiertos,
Los besos inciertos.

Creímos amarnos, sonriendo gozosos,
Tomadas las manos con fuerte dulzura,
Nos fuimos cantando, pensando: mañana
Tal vez otro barco volverá a zarpar.

Partieron mil naves, seguidas
De cerca por gráciles aves,
Volvieron los soles a teñir el cielo,
Pero no hubo más sueños en las otras tardes.

Los rumbos del cielo me llevaron lejos,
Construí un castillo, conquisté una reina,
Los sueños de niño quedaron dormidos
Y fueron rodando por el Universo.

¿Qué fue de tu vida?, ¿seguiste a un marino?
¿Te llevó, galante, en blanco velero?
Quizás nunca fuimos amantes, ni nada.
Tal vez ni siquiera nos conocimos."

4 comentarios:

Unknown dijo...

De tal palo tal astilla...De tal poeta tal "fill in the blanks"...

¡Felicitaciones al gran poeta por el regalo!

Saludos,

Paul

Andrea Castro Dussert dijo...

Muchas gracias por tu hermoso comentario...
Un abrazo,
Andrea

jgonzalez dijo...

....viejo marinero, navegante, enamoradizo, el azul intenso de la tarde de valparaiso y el aroma exquito del pescado frito en un lugar que solo el sabe...., quizás te vi un día y no me di cuenta de tu nostalgia.......y yo pensaba que solo me pasaba a mi.

gracias por el lindo poema.
jaime

Georgette Sarrás dijo...

Por favor, agradece al padre en mi nombre haberle devuelto a Valparaíso la poesía... Ya hacía falta.