23 ago 2007

EL LOCO


En el Tarot, el Loco no tiene número, puede ser último o primero, escoja usted…

Pero ¿Quién es el Loco? ¿Cuántas vidas tiene? ¿Cuántas máscaras?

Preguntémosle a Jung… o primero a Khalil Gibran:






EL LOCO

Me preguntáis como me volví loco. Así sucedió:

Un día, mucho antes de que nacieran los dioses, desperté de un profundo sueño y descubrí que me habían robado todas mis máscaras -si; las siete máscaras que yo mismo me había confeccionado, y que llevé en siete vidas distintas-; corrí sin máscara por las calles atestadas de gente, gritando:

-¡Ladrones! ¡Ladrones! ¡Malditos ladrones!

Hombres y mujeres se reían de mí, y al verme, varias personas, llenas de espanto, corrieron a refugiarse en sus casas. Y cuando llegué a la plaza del mercado, un joven, de pie en la azotea de su casa, señalándome gritó:

-¡Miren! ¡Es un loco!

Alcé la cabeza para ver quién gritaba, y por vez primera el sol besó mi desnudo rostro, y mi alma se inflamó de amor al sol, y ya no quise tener máscaras. Y como si fuera presa de un trance, grité:

-¡Benditos! ¡Benditos sean los ladrones que me robaron mis máscaras!

Así fue que me convertí en un loco.

Y en mi locura he hallado libertad y seguridad; la libertad de la soledad y la seguridad de no ser comprendido, pues quienes nos comprenden esclavizan una parte de nuestro ser.

Pero no dejéis que me enorgullezca demasiado de mi seguridad; ni siquiera el ladrón encarcelado está a salvo de otro ladrón.

14 ago 2007

13 dioses


Según la mitología nórdica, Odin, dios de los guerreros, invitó a cenar a once de sus amigos dioses, a su palacio de Valhalla. Loki, "dios" de la guerra y del mal, se sintió ofendido por no ser considerado a formar parte de tan magno evento y decidió invitarse, a pesar de no ser bienvenido. Aquel era el integrante número 13 a la mesa. Odin, tenía un hijo predilecto, Balder (o Baldur), el más agraciado de los Aesir, dios del amor y de la luz quien intentó expulsar al intruso. Loki era celoso, ambicioso y siempre buscaba la aprobación de Odin por medios siniestros, elaborando planes de discordia entre los dioses, pero Balder era rápido y leal a Odin. Entonces, comienza una terrible y sangrienta batalla entre los dos dioses. Al no poder atacar directamente a Balder, Loki finjió atacar a Odin. En vista del peligro inminente, Balder se abalanzó sobre Odin para protegerlo y Loki aprovechó la oportunidad para disparar una flecha envenenada directo al corazón de Balder. Otra versión dice que la muerte de Balder ocurrió durante un juego con los mismos 13 integrantes; Loki le dió una flecha con muérdago a Hodur (hermano ciego de Balder) y, sosteniendo su mano, le ayudó a disparar el arco, atravesando el pecho de Balder. En los países escandinavos, el número 13 es un mal presagio y 13 invitados a la mesa es una maldición.

Esto me llegó de Juan Pérez, el 13 de Agosto a las 13:13 hrs.

12 ago 2007

Afortunadamente...


“Mi hijo está con gripe, de nuevo, ¿puedes creerlo?”
“Uy, qué lata, ¿y es seria la cosa?”
“Lo típico. Gracias a Dios que no requiere de antibióticos”.
“Sí, es que desafortunadamente, está todo el mundo igual...con este clima... Pero conozco un datito requete bueno, es un secreto de naturaleza: la abuela de la Pity, ¿te acuerdas de la Pity?, bueno, resulta que ella le daba aceite de Bacalao a todos los nietos, y todas las mañanas más encima. ¡Santo remedio! Y nunca se enfermaban”.
Si yo creyera en Buda, o en Alá, o en la Fortuna, tal vez el aceite de Bacalao no funcionaría. Tal vez, apenas sabría lo que opinan los Santos de este remedio. Lo cual me “lleva” a pensar que toooodo lo que decimos, tiene que ver con nuestras creencias. Obvio, nuestras palabras nos traicionan.
Y que hay de eso: “¿Qué dice Juan Pérez de esta situación?” (O qué dicen los Santos, en este caso). Te puedo contar lo que dice Juan Pérez, te puedo contar, con mis palabras, lo que dice Juan Pérez. Y vuelvo a mi mapa...Que me guste o no lo que dicen los demás, por el sólo hecho de repetir, o recordar lo que debieran decir, o deducir lo que se supone debieran decir...vuelvo a mi mapa. Con mis palabras. Con mis creencias integradas. Porque no va a faltar el “gracias a Dios”, el “afortunadamente”, e incluso las generalizaciones...De alguna manera, aflorarán los surcos, los juicios, las tan cómodas costumbres...el “yo creo que va a decir tal o cual palabra” y esa palabra, a su vez, tendrá tal o cual creencia. Mejor me reconcilio con las mías y las envuelvo en un paquete tan, pero tan atractivo...que te las regalo con cariño y, bueno, luego me das ¡tu opinión!

2 ago 2007

El vacío

Un día te miras en el espejo y piensas que estás vacía.

Es un momento de reflexión en el camino del tiempo.

Tus ojos observan qué es lo que ocurre a tu alrededor.

Te focalizas con una intensidad profunda en aquello que crees no tener.

El vacío se hace más y más grande... cuestionas los caminos que has seguido, cuáles podrías haber elegido y con quiénes podrías haber estado.

¿Por qué éste?
¿Por qué no mil otras vidas?

Días después, vuelves a mirarte en el mismo espejo.

Ahora te concentras, completa y totalmente sólo en aquellas cosas que "" tienes y que te hacen ser quien eres.

Al frente tuyo, aparecen aquellas cosas que haces, que vislumbras que vas a hacer, el camino que estás recorriendo y con quienes lo recorres.

Después, otro día, descubres que la imagen de tu espejo ya no es la misma...

Una sonrisa tranquila.

Un día de lluvia.

El olor a tierra mojada.

Una escalera.

Sin darte cuenta subiste un nuevo peldaño.

¡Por fin!

Extrañas formas de crecer y aprender ...