11 feb 2008

Raices con alas


Hodding Carter dijo "Hay dos legados perdurables que podemos transmitir a nuestros hijos: uno son raíces, el otro son alas".

Ayer, mis hijos se fueron de vacaciones, él empuñando una espada y con un chocolate en el bolsillo, ella con la boca llena de proyectos y aventuras... y como tantos otros hijos, de diferentes edades, parten a descubrir el mundo.

Somos muchos los hijos que nos hemos alejado del hogar para ir y averiguar si en otro lado podemos "marcar nuestro territorio", a veces con alegría y esperanza, otras veces con algo de temor. Algunas veces hemos vuelto y otras no. Algunos se fueron a colonizar...tu sabes.

Encontraron un pedazo de tiempo y lo cuidaron y plantaron arboles y los regaron, uno cavó un pozo, el otro se hizo alcalde...Una chimenea, un hogar, un plato colgado en la pared, olores a menta y a romero, un cementerio con historias, una capilla, un bar y un curita alegre, abuelas sentadas bajo abedules testigos de amores y partidas de naipes, niños en la escuela, bancos de madera, tus ojos recuerdan ese calor de verano y tus amigos, tus amigos siempre, bañandose en un rio...Y en invierno, recuerda los cuentos de tu abuelo, cerca del fuego, cerca de tu amor...

Lejos de todo y lejos de mí es donde estás en tu casa, desde donde partes y a donde vuelves sin cesar. Donde, tal vez, si miras con cariño tu pasado...


Sí, creo que les damos alas todos los días, ¿porqué nos cuesta tanto darles las raíces?